Cómodamente

La moneda rodó tintineando gastos, se quedó varada en el precipicio de las finanzas y se fundió con el contrato. Cuarenta años de letra pequeña, dos cuartos y una misera terraza con vistas al humo de la avenida. 

Su sonrisa era tan luminosa que no llegó a ver los cuarenta y siete buitres que volaban en círculo, esperando un descuido del estómago ruidoso de los que no pueden y necesitan tener. 

Anuncios

Descubre más desde El descanso del Onironauta

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Comentarios

2 respuestas a “Cómodamente”

  1. Avatar de azurea20

    Buenísimo. Pobre moneda. ¡En qué manos fue a caer!.

    Le gusta a 1 persona

    1. Avatar de El Onironauta

      En la mano de los de siempre. El dinero atrae al dinero.
      Gratos sueños.

      Me gusta

Susurra al abismo. Alguien, en algún sueño, escuchará.